Lo mejor para tener un gran ficus es insertarle un buen abono. Y para ello te proponemos una manera muy sencilla.
Los ingredientes son:
miel
leche fría.
Solamente tenemos que mezclar una cucharada de miel con leche fría en un vaso y mezclarlo bien. Una vez que tenemos esta mezcla la añadimos con el agua del riego y la mezclamos para que quede bien disuelta. Con estos riegos los Ficus crecerán fuertes y lo que es aún mejor cogerán más color.