Trucos para tener muchas flores en los geranios

Los geranios son plantas muy apreciadas que se adaptan muy bien a balcones y patios, pero es importante tener en cuenta que necesitan protección contra las heladas. No obstante, en caso de que el clima sea muy frío, se pueden mantener en el interior del hogar durante el invierno sin dificultad alguna. Con la llegada del buen tiempo, es recomendable trasladarlos al exterior para que florezcan y embellezcan el espacio.

Sin embargo, en ocasiones, las flores de los geranios tardan en aparecer debido a diversas circunstancias que pueden estar afectando su desarrollo. Por suerte, existen algunos trucos sencillos que se pueden aplicar para estimular su floración.

Los geranios necesitan mucha luz

Para que los geranios florezcan, es imprescindible que reciban luz natural directa del sol, ya que la luz artificial de los interiores no es suficientemente intensa para estimular su crecimiento. No obstante, hay que tener precaución al exponerlos al sol directo después de haber estado a la sombra o en el interior, ya que sus hojas pueden quemarse.

Es importante destacar que los geranios pueden florecer en semisombra, lo que los hace ideales para aquellos que viven en pisos donde la luz solar no llega de forma directa.

Espacio para los geranios

Otro factor clave para el crecimiento y floración de los geranios es el espacio. A menudo, las plantas se venden en macetas pequeñas para que puedan enraizarse fácilmente, pero esto significa que eventualmente necesitarán más espacio para crecer. Si las raíces no tienen suficiente espacio para crecer, la planta dejará de crecer y florecerá. Por lo tanto, es importante trasplantarlos en macetas más grandes de vez en cuando o plantarlos en el jardín si el clima y el suelo son adecuados.

Abona los geranios

Si tienes geranios en macetas, es importante que los fertilices durante la primavera y el verano. A medida que los geranios crecen, es posible que no necesiten ser trasplantados a macetas más grandes, ya que suelen ser plantas pequeñas y se mantienen bien en macetas de hasta 30 o 40 centímetros de diámetro.

Para asegurarte de que las raíces de los geranios reciban los nutrientes necesarios para producir flores, es importante fertilizarlos. Puedes elegir entre abonos orgánicos, como compost, humus, abono verde, guano, estiércol de animales herbívoros, cáscaras de huevo y plátano, entre otros. Simplemente agrega un puñado de abono a la tierra alrededor de cada planta y mézclalo con la capa superior del suelo.

También puedes utilizar fertilizantes químicos específicos para plantas con flores o para geranios, siguiendo las instrucciones de la etiqueta para la cantidad y la frecuencia de aplicación. Asegúrate de no aplicar una sobredosis de fertilizante para evitar dañar las plantas.

Poda de los geranios

A principios de primavera es beneficioso realizar podas ligeras en los geranios para estimular la producción de nuevos tallos y flores. No se debe efectuar una poda severa que dañe la planta, sino reducir la longitud de los tallos en unos centímetros, dependiendo de su tamaño. Para ello, es recomendable utilizar tijeras de podar limpias y desinfectadas.

Además, es conveniente aplicar pasta cicatrizante en las heridas de la planta para prevenir infecciones, especialmente si en la zona donde se encuentra suele llover en esa época del año. De esta manera, se asegura una poda saludable y efectiva en los geranios.

Riega los geranios cuando sea necesario

El control de riego no es una tarea sencilla que se pueda dominar de la noche a la mañana. Hay muchos factores que hay que tener en cuenta, como el clima de la zona, el tipo de sustrato o tierra de la planta, su tamaño y si se encuentra en el interior o el exterior de una casa.

Los geranios no toleran la tierra completamente seca, pero tampoco las raíces encharcadas. Es importante saber que la capa más superficial de la tierra se seca rápidamente, mientras que las capas más profundas permanecen húmedas por más tiempo. Por lo tanto, es fundamental verificar la humedad de la tierra utilizando un medidor, un palo de madera delgado o simplemente cogiendo la maceta después de regar y volviendo a hacerlo después de unos días.

En cuanto al agua, lo ideal sería usar agua de lluvia, pero si no es posible, se puede utilizar agua potable o del grifo, siempre y cuando sea apta para el consumo humano.

Medidas preventivas para proteger los geranios de la mariposa

Es importante que tomes medidas preventivas para proteger a los geranios de la mariposa. Puedes leer más información aquí.

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